En la Polinesia Francesa, las Islas de la Sociedad son bien conocidas por todos. Sus nombres evocan por sí solos el paraíso. Bora Bora, Tahiti, Huahine, Tahaa… Ven a descubrir los rincones más bellos de estas islas míticas.
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El mirador de Taravao en la península de Tahiti
Con sus verdes prados, caballos y vacas, la carretera que sube al mirador desde Taravao hasta la península de Tahiti tiene realmente un aire de paisaje normando. Podrás admirar el Océano Pacífico desde ambos lados del istmo que une la isla de Tahiti con la península de Taiarapu. Un lugar que no debes perderte en Las Islas de Tahiti.
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Las tres cascadas de Tahiti
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La cascada del valle de Maroto en Tahiti
Ya sea a pie o en un vehículo 4×4, un paseo por el valle de Maroto es un auténtico viaje al corazón del exuberante entorno natural de Tahiti. Un paseo que te llevará hasta la famosa cascada de Maroto y su soberbia cuenca 6 metros más abajo. Si te apetece, puedes dar el brinco. Si eres menos aventurero, no te preocupes: ¡un refrescante chapuzón en las aguas cristalinas te sentará de maravilla!
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El mirador de Opunohu en Moorea
Fácilmente accesible mediante un agradable paseo a pie, o en coche para los menos valientes, el mirador de Opunohu ofrece una vista extraordinaria desde lo alto de sus 240 metros. Podrás admirar la bahía de Opunohu a la izquierda, la bahía de Cook (también conocida como bahía de Paopao) a la derecha, y el majestuoso monte Rotui en el centro. Un lugar ineludible de la Polinesia Francesa.
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El banco de arena habitado por rayas y tiburones en Moorea
Es imposible ir a Moorea sin hacer una magnífica parada de buceo o snorkel en el banco de rayas y tiburones, situado a unos cien metros de la orilla en Haapiti. Las hermosas rayas y los tiburones de puntas negras se han instalado alrededor de un banco de arena a un metro de profundidad. Con los pies en el agua, ponte la máscara y el tubo y admira el ballet.
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Playa de Temae en Moorea
Es sin duda una de las playas más bellas, si no la más bella, de la isla de Moorea. Haz una excursión al mirador de Toatea para admirar la larga extensión de arena blanca de la playa de Temae y su laguna, una auténtica carta de colores azules. Magníficas vistas de Las Islas de Tahiti, un gran cocotero, magníficos corales, aguas cristalinas rebosantes de vida e incluso rayas y tortugas, si tienes suerte. Es la postal tal como la imaginamos.
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El marae Taputapuātea en Raiatea
Declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en julio de 2017, el marae Taputapuātea es el mayor marae de Las Islas de Tahiti. Situado en Raiatea, la isla sagrada, el marae Taputapuātea es la cuna del triángulo polinesio que une Hawái, Nueva Zelanda y la Isla de Pascua. El yacimiento arqueológico está formado por varios marae muy bien restaurados. Una visita a este lugar sagrado es absolutamente imprescindible si quieres comprender su importante papel en la historia de la Polinesia Francesa.
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El jardín botánico y mirador de Faaroa en Raiatea
Se trata de dos lugares de visita obligada en tu viaje a la isla sagrada de la Polinesia Francesa. Inaugurado en 2020, el jardín botánico ocupa tres hectáreas. Mientras paseas por los senderos bien mantenidos, admira las hermosas especies de plantas y flores tropicales, algunas de las cuales son incluso endémicas de la isla de Raiatea. Otro lugar que descubrir en tu viaje es el mirador de Faaroa. Domina toda la caldera del valle de Faaroa.
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El jardín de coral en Taha’a
Al oeste de la pequeña isla de Taha’a se extiende un fabuloso jardín de coral. Esta laguna de aguas turquesas te ofrece la posibilidad de observar multitud de peces en un entorno excepcional. Es como un acuario gigante. Déjate llevar por las corrientes y disfruta de un chapuzón en el coral. Mira hacia arriba y podrás ver Bora Bora a lo lejos. Se trata de una excursión mágica, así que no dudes en añadirla a tu lista de actividades y sube a bordo del barco que te llevará allí desde Raiatea o Taha’a.
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Playa Fare, Maitai Lapita, Huahine
En la Polinesia Francesa, la isla de Huahine es famosa por su profunda laguna cristalina salpicada de magníficas bahías y playas de arena blanca. Esta isla del archipiélago de la Sociedad está repleta de playas, cada una tan paradisíaca como la otra. La de Fare, cerca del hotel Maitai Lapita y del pueblo principal, es imprescindible. Arena blanca, agua turquesa, vistas sobre los valles de la isla… Es perfecta para relajarse, hacer paddle surf o nadar en la laguna.
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